En Indonesia, el aborto está legalmente restringido y sólo se permite en circunstancias específicas. El aborto está permitido hasta las 14 semanas de embarazo, pero sólo en casos de urgencia médica o violación.
En agosto se decidió que sólo la policía tendría derecho a conceder el acceso al aborto a las embarazadas como consecuencia de una violación.
En este artículo se cita a la organización asociada a SAAF, Jakarta Feminist, acerca de los cambios legales:
«En general, las mujeres siguen teniendo miedo a causa de la cultura, las normas y también la religión», afirmó Olin Monteiro, del grupo Jakarta Feminist, uno de los varios grupos de derechos que piden que se revisen las normas. «Estos valores dificultan el acceso de las mujeres cuando tienen derecho a interrumpir un embarazo», dijo, «Esta normativa significa que las víctimas sólo tienen una opción. Tienen que acudir a la policía. Por tanto, es muy limitante».